Algunos dicen que con la vida del bodyboarder profesional, Andre Botha, se podría hacer un libro. A los 17 años se convirtió en el campeón mundial más joven en la historia de su deporte y al año siguiente revalidó su título.
Botha nunca volvió a competir a pesar de haber permanecido «relevante» como profesional en los últimos años. Andre está siempre presente en North Shore de Oahu, ha desafiado algunas de las olas más fuertes en el mundo. Fue durante una sesión en Pipeline que su nombre fue de nuevo referencia destacada en los surf media y más!
Esto se debe a que el sudafricano compartía sesión con varios surfistas, incluyendo al conocido Floridiano Evan Geiselman que pilló una de las «bombas» del día. A pesar de haber hecho todo bien la ola «chapó» con Evan dentro.
El wipeout fue tan violento que Geiselman quedó inconsciente y fue arrastrado violentamente bajo el agua por la corriente hacia Eukai. El accidente probablemente habría sido fatal si el ex campeón del mundo no lo habría rescatado inmediatamente. André logró sacarlo bajo el agua y lo mantuvo a flote hasta que otros como Mick Fanning y algunos socorristas llegaron.
Si Botha no había logrado mantener su cabeza fuera del agua durante ese tiempo su caída probablemente habría sido fatal. Evan fue hospitalizado pero ya está fuera de peligro!
