EL VIAJE DE NUESTRA VIDA

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Mentawai & Tsunami Por Raúl Gunche.

Publicado en el #146 de 3Sesenta

Padang, Sumatra, Indonesia. 20 de octubre de 2010, 5 cántabros, 2 vascos, un gallego, un astur, dos uruguayos y 2 franceses nos reunimos y partimos hacia las ansiadas islas  Mentawai. Duración del viaje 12 días en el barco King Millenium II.

El comienzo es perfecto, la ola “Hollow Trees” muy buena y con un tamaño consistente de metro y medio. Surfing bueno todo los días en spots como “Lances”, “Rags”, “Thanders” y la joya de la corona indonesia “Greenbush”…. hasta que la noche del 25 de octubre sobre las  22:15 pm hay un  terremoto de 7,7 grados en la escala de Richter  con un posterior tsunami muy cerca de donde nos encontramos nosotros.

El  epicentro fue en la Latitud 3.484°S, 100.114°E. Profundidad: 20.6 kilómetros. En la placa tectónica de “Burma”, al sur de la isla de “Pagai”, 150 millas al oeste de “Bengkulu”. La alerta de tsunami no funcionó. Las boyas no estaban operativas por falta de mantenimiento.

Durante las siguientes horas se sucedieron 14 réplicas de hasta 6,2 grados. La falla donde se produjo el terremoto es la misma que en el 2004 destruyó localidades costeras de una docena de naciones bañadas por el océano Índico y causó 226.000 muertos

Este día, 25 de octubre, después de surfear  “Rags”, Poto, dueño y guía del barco, nos lleva a un sitio tranquilo para dormir.

Son las 20 horas y Edu, el cocinero nos ha preparado una suculenta cena. Empezamos a mover el bigote cuando el barco arranca motores y se dirige a una zona aún más protegida y con el doble de fondeo. ¿Nos preguntamos porque nos movernos de sitio si estábamos de lujo? Pues no lo sabemos … pero al cabo de un par de horas   “viva Poto y la madre que lo parió” porque esa decisión será nuestra salvación. El nuevo punto de fondeo está en “Sikakap” entre las islas “Pagai Utara” y “Pagai Selatan”,  una zona de mucho calado.

Después de la cena, charla con los colegas, algún video de surf y sobre las 22 horas por lo general caemos rendidos todos como niños. Son las 22:15 y con los piños lavados estamos charlando en nuestro camarote Rubén Abelenda, Borja Ibarra y yo. El océano está en calma, la gente ya descansando y de súbito el catamarán se balancea. Las maderas del camarote crujen, nos miramos los 3 y al unísono comentamos: ¡qué raro no! , de dónde habrán salido estas olitas….

A los 30 segundos todo vuelve a la calma. No le damos más importancia y a dormir se ha dicho.

Nosotros, no somos conscientes de nada hasta el amanecer, sin embargo desde España consiguen contactar con Poto para ver si estamos bien, pues ya saben que ha habido un terremoto con  tsunami incluido.

Algún compañero se levanta a las 3 am porque de súbito sus móviles les despiertan dando señal de cobertura. Salen a llamar a la parte exterior del barco y entonces ven cientos de árboles, palmeras flotando… Ellos empiezan a percatarse del tema pero Poto para no alarmarnos no nos dice nada hasta la mañana siguiente.